El Polígono Industrial de Ajimar ya ha repuesto 9.000 metros cuadrados de aceras en el marco del I Plan de Áreas Industriales del Cabildo de Gran Canaria, que ha destinado a este recinto 660.000 euros para la reposición de 18.200 metros cuadrados de aceras, mejorar el vallado perimetral y dotar el espacio de nueva señalización vial.
El presidente del cabildo, Antonio Morales, pudo comprobar hoy el estado de los trabajos de la mano del presidente de la Asociación de Empresarios del Polígono Industrial Ajimar, Juan Sarmiento, quien explicó la mejora que supone esta intervención para las 42 empresas ubicadas en este espacio situado sobre la GC-1 frente a Las Terrazas.
La primera fase está a punto de culminar tras una inversión de 340.500 euros para las aceras de las calles El Chip, El Módem, El Procesador, El Monitor y El Scanner, además de la reparación de la verja metálica del vallado en la Avenida de Joan y Víctor Jara, detalló también a la alcaldesa de Telde, Carmen Hernández, quien destacó el vuelco que han dado las áreas industriales del municipio, y la consejera de Industria, Minerva Alonso, quien considera básica estas intervenciones para convertir estas áreas industriales en auténticos polos de atracción económica y creación de empleo.
La segunda fase, que comenzará a ejecutarse próximamente con una dotación de 320.000 euros, intervendrá en la calle El Bite y El Diskette, y contempla el arreglo del vallado en El Monitor, la realización de un paso elevado en la calle El Scanner, a la entrada del recinto, y la colocación de señalización viaria horizontal, explicó.
La reposición de las aceras incluye el rebaje de bordillos en los pasos de peatones para que este polígono sea accesible para personas con movilidad reducida.
10 millones
Estas intervenciones están contempladas en el Plan Estratégico de Áreas Industriales dotado con 10 millones de euros para realizar una treintena de obras en las zonas industriales de la Isla, subrayó Morales.
Entre 2009 y 2015 no se realizaron actuaciones en polígonos industriales de Gran Canaria, por lo que el estado de conservación de algunos de ellos era muy deficitario. Por ese motivo, el Cabildo encargó un diagnóstico que dio lugar al Primer Plan Estratégico, una hoja de ruta que marca las intervenciones necesarias para la recuperación de estos recintos tan importante para la economía grancanaria.